Hace mucho tiempo un gato llamado Timy andaba buscando comida. Él encontró un callejón un cubo de basura, rebusco en el cubo pero entonces le llegó olor a pollo. Se asomo a una ventana que había encima del cubo de basura y ahí estaba el pollo con patatas. Timy no se pudo aguantar y entro con cuidado. Fue a robar el pollo pero no lo consiguió. El pollo se quedo donde estaba y el pobre Timy salió volando por la ventana. Pasados unos días Timy se encontró con unos colegas- Llamense Paqui, Tom, Henry y Tod todos ellos eran amigos de la infancia. Timy les contó lo que le había pasado. Entre todos idearon un plan; irian a esa casa y le darian un susto al señor de la misma. Pero, ¡que suerte! Al asomarse por la ventana descubrieron un suculento pollo. Todos se miraron y comenzaron su plan. La ventana estaba abierta, fueron entrando uno a uno. Paqui cogería el pollo y los demás disfrazados de fantasma esperarian a que apareciese el señor de la casa para asustarle. Estaban cansados de esperar cuando oyeron un ruido. Se colocaron en posición y .......pssssssssssssss desaparecieron los gatos. ¿Cuál fue la causa? En vez del señor habia hecho su aparicion un tremendo perro que sonriendo sostenia el pollo en la pata. Corre que te corre desaparecieron los gatos. Pensareis pobre señor; pero no. Pobre de ellos porque además del susto ja ja se dieron cuenta de que el pollo era de plástico. Yo lo había puesto en la bandeja al lado de la ventana para que lo vieran cálleran en la trampa y entraran a por él.
JA
JA JA ............................
¡AY!
¡AY! Timy y sus amigos se miraron los unos a los otros cuando se dieron
cuenta de que el pollo no era tal. Las tripas
le rugían y el señor se les reía.
María, 6º
